"Escenas costumbristas Bdsm: "Un dia de perros"

 Una Dómina profesional regresa a su domicilio tras una de sus jornadas laborales. En la casa, le recibe desnudo y de rodillas su esclavo personal. El siervo, enseguida percibe que el estado de ánimo de su Ama, es de esos que a veces le hacen cuestionarse su posición frente a esta mujer, y desear que fuese otro el que ocupase su lugar; sin embargo, por otra parte se siente excitado, pues para él, una Diosa airada posee un poder de sugestión y un grado de belleza superlativo, ante el cual, la razón y la voluntad se convierten en un esfuerzo vano e irrelevante.

El Ama mira a su esclavo con displicencia, y se dirige a él...

-" He tenido un día de perros... De perros de la peor especie, de esos que me despiertan lo peor de mi misma.... Necesito a un buen esclavo que me ofrezca su culito para que su ama pueda liberar este stress tan negativo que lleva metido dentro...¿Estas dispuesto a ser un buen esclavo para tu ama?"
-" Sí... Sí, mi Señora" - contesta el esclavo en un tono que no denota una gran disposición -
-" Si..Si, mi señora - dice el ama en tono de burla-... ¿Eso es todo lo que tienes que decir con la boca tan pequeña?"
- "Mi señora, quería decir que para mi será un honor ofrecerme para tu desahogo"
-Esa contestación es más de mi agrado, bien sabes cuanto valor le doy a las formas protocolarias que siempre deben mantenerse ante una dama, pues las buenas formas externas, a fuerza de su uso terminan por moldear el interior de un buen siervo... ¿ No crees?"
-" íi, mi señora.. Y agradezco y deseo tanto ser moldeado a tu capricho"

La Dómina acaricia la cabeza de su siervo al tiempo que dice...

-" Así me gusta...Regresar a casa después de este día y que mi esclavo me acaricie los oídos....  Me hace sentir algo mejor... No hay nada como un perro bien adiestrado por su ama... Ahora, ponte a cuatro patas"

El esclavo cuadra su sumisión a cuatro patas y la domina se monta sobre él.

" Siguiendo con la importancia de las buenas formas... Hoy, me ha llamado un personaje que se dirigía a mi como si fuese la recepcionista de una empresa de servicios sexuales, y yo estuviera obligada a darle toda la información que requería....  Típico...《el preguntón》.. A los veinte segundos le he colgado el teléfono, y me parece que he tardado demasiado en hacerlo.... No hay nada que me desagrade  más que un perro obtuso e irrespetuoso"

Zas Zas Zas zas!!!

Le propina unos buenos azotes y luego continua relatando como ha sido su día, su día perros. El tono con que se dirige al siervo está a medio camino entre lo furioso y lo ensimismado.
Un hombre sometido  a cuatro patas con una mujer sobre él propinándole unos azotes, no le queda más opción que aprender a saber escuchar.  "A fuerza ahorcan"

" Después, he tratado con otro personajillo.... De esos que se piensan que una Domina es una meretriz de Babilonia... 《el Putero》... La peor clase de perro"

Zas Zas Zas Zas!!

"Ha sido una jornada muy completita... En la que no podía faltar 《el regateador》... Tanto les cuesta entender que no se paga, que se tributa. Una de las connotaciones que tiene la palabra tributar es mostrar agradecimiento y respeto. Una Ama, crea un espacio único, donde el sumiso no se sienta un bicho raro; un Ama te va a escuchar, va a tener en cuenta tus límites, tus anhelos, tus fantasías, tus miedos, pero siempre desde su posición de mando, porque todo se desarrolla en el universo que ella ha creado de la nada. Puedo llegar a ser muy comprensiva, que no todo el mundo puede permitirse ciertos lujos...Pero, regatear a una dama, que se ha convertido en la Diosa de su propio universo por méritos propios, es vulgar, y demuestra una falta absoluta de respeto..."

Zas Zas Zas Zas!!!

-" Y como guinda del pastel... 《el sumiso así》... Este, nunca puede faltar para que la jornada sea de lo más completita... Quiero que me pisen así, que me humillen de esta forma, que me castiguen de esta otra y que me azoten así, pero ASI, y no ASAÓ, ni demasiado fuerte..  Dominación a la carta... El típico sumi que pretende mandar desde abajo... Y Claro, como estoy pagando un dinerito y ya que he venido hasta aquí... Pues.... ¿Follamos no?"

Zas Zas Zas Zas!!

" SiÍi...Cuanto perro hay con una idea  muy preconcebida de como quiere ser dominado, preconcebida hasta el milímetro en una fantasía ideal, que como es ideal solo puede existir y realizarse en su cabeza, con lo cual, su castillo en el aire pleno de expectativas inevitablemente va desmoronarse en cuanto no se cumpla al milímetro, cada aspecto de dicha fantasía. Por muy experta que sea el Ama, se van a sentir defraudados. Y no quieren darse cuenta de que, precisamente, es esa fantasía ideal la que les impide disfrutar; someterse y dejarse llevar por un camino de descubrimiento y sensaciones inéditas. No quieren entender, que nadie puede  estar a la altura de sus propios ideales, de las  perfectas fantasías de si mismos...
Sin ir más lejos así eras tú al principio, ¿Te acuerdas la primera vez que acudiste a mí? Eras el perfecto 《sumiso así》... Hasta que fuiste adiestrado por tu Ama, y se te acabaron las tonterías... ¡Sois todos unos perros duros de mollera!"

Zas Zas Zas Zas!!

"Claro que, yo tampoco soy perfecta, pero tu adoras hasta mis imperfecciones ¿Verdad perro?"

Zas Zas Zas Zas!!!

Tras esta última ráfaga de azotes indiscriminados, el ama se incorpora de su improvisada montura. Le pisa la espalda obligándole a inclinarse más ante ella.

"Lame mis botas esclavo"

Y el esclavo lame deseando fervorosamente traspasar el cuero de la bota, para que su Ama sienta que no existe devoto más fiel sobre la faz de la tierra.

"Así me gusta..  Buen esclavo....Empiezo a sentir que me reconecto de nuevo con mi esencia divina"

El Ama se sienta en su sillón. Reclama la presencia del esclavo para que le quite las botas. El esclavo obedece tan ceremoniosamente que parece estar llevando acabo un verdadero ritual místico. El ama exhibe sus pies ante su devoto esclavo.

" Mmm.. Los días de perros me producen mucha tensión, y la tensión me deja los pies fríos... ¡Helados!...  Hasta que no entran en calor, mi cuerpo también parece quedarse gélido... Soy una dama muy sensible, y quisiera saber si en esta sala, en esta sagrada sala, hay un caballero, un verdadero caballero dispuesto a entregarme sus testículos para que mis pies entren en calor"
-" Ohh.. Si mi señora, -  dice el esclavo en un tono que delata su imperiosa excitación -,  será para mi un gran..."

Antes de que termine la frase la domina ha colocado su empeine por debajo de los genitales del esclavo, y empieza a frotarlos levemente con su pie, este siente como todo se estremece dentro de él, una especie de convulsión que atraviesa lo físico y se adentra en un territorio que va más allá de lo sensualmente tangible.   
El ama, percibe al esclavo tan frágil e indefenso ante ella, que en ese momento se siente una verdadera Diosa, dueña absoluta de ese cuerpo postrado, de esa alma desfallecida y de una insignificancia tan conmovedora. Se dispone a seguir disfrutando de ese momento tan único.

-" Siii... Así me gusta..  Ahí es donde debe florecer mi juguetito... Arrodillado a mis pies, siempre dispuesto a satisfacer a su dueña en la manera que desee... ¿Verdad?"
-"Ahhhh... Si... Si.. Mi... Señora.. Ahhh"
-" Mmm... Patearte las pelotitas, eso sí que terminaría de relajarme y sacudirme de encima todo este malestar producido por todos esos perros indeseables.."
-" No, No.... Ahhhb..  No, no por favor... Ya sabes que... No lo.. Ahhh.. Por favor... Ahhh
-" Pues entonces me vas a tener que comer el coño, y ya puede ser la comida del siglo perro..."
-" Ahhh Si... Lo será.. Ahhh.. Lo será Ahhjjj"

El Ama, sigue manteniendo su pie bajo los genitales del sumiso, pero ahora ejerce una mayor presión hacia arriba.

-"¿Ah si?... Asi que patearte las pelotas NO, pero comerme el coño SI... ¿Estas negociando con tu dueña? ¿Estas puenteando con tu Ama? ¿Pretendes mandar desde abajo?  ¡Que pronto se te olvida que eres mi perro! "
-: Ahhh No, no... Sólo... Ahhh... Te lo suplico..... Es lo... Único... Que puedo... Ahhh....Hacer ante ti.. Ahhh..  Soy tu perro...Por favor... Haré lo que... Quieras... Pero Por favor... No..."
-" Eres mi perro... Ya haces todo lo que quiero... ¿Qué más puedes hacer aparte de suplicar como el perro que eres?
-¡ Sólo supli... Suplico...  Ahhh... Mi...Señora Ten piedad de mi"
-" Noto tus huevos un poco fríos... ¿No habrás estado jugando con mi juguete sin permiso? Porque entonces si que te voy a patear..."
-" Ahhh.. No, no, no... Se me... Ahhh... Ocurriría... Ahhh... Tal... Ahhh.. Cosa"

El Ama se levanta. Se dirige hacia donde tiene colocadas todas sus herramientas de trabajo. Coge una fusta. Señala con su dedo índice el suelo. El esclavo acude postrándose a sus pies inclinado a cuatro patas.

"Muy bien, pues entonces empieza a suplicar tu perdón, vas a tener que suplicar un perdón universal por todos los perros que pueblan está tierra. Si no me puedes dar la satisfacción de patearte, al menos voy a obtener el placer de la fusta... Si no te gusta el caldo beberás dos tazas de mi fusta... ¡¡Besando mis pies Perro!!

Zas Zas Zas ZAS!!

La fusta es un pincel de fuego que escribe una perfecta caligrafía, sobre las posaderas humilladas del sumiso, en finos y precisos caracteres. El ama redacta su propia ley, siempre efectiva pues es sencilla de acatar, ya que se  promulga sin edictos burocráticos, directamente del cuero a la piel del súbdito. A este, el ama le conduce hasta el umbral de su capacidad para soportar el castigo, conoce bien la piel sobre la que dicta sus leyes. El esclavo suplica un perdón divino de carácter universal. Mientras sufre el metódico flagelo, sus labios besan los pies como si fueran sus últimas muestras de adoración antes de morir, pero sin que la vida se escape del todo. Sus labios, trasmiten un eterno estertor, para salvar a todos los perros sumisos que en el mundo son, y redimirles de algún tácito pecado original que los esclavos cometen a diario hacia las amas. El pie de la Diosa airada se eleva para pisar la espalda del sufrido y redentor esclavo, y la fusta ejecuta sus últimos sagrados decretos.
El castigo cesa, mas nunca la extrema obediencia. Le obliga a incorporarse de rodillas acercándole la cara a su vagina, al tiempo que le dice con una voz que sugiere una suerte de sosegado y pre ambular éxtasis...

-" Ahora... Como te decía... La comida del siglo perro, si no quieres que te siga azotando"

Fin.