"DIALOGO PLATÓNICO ENTRE UN AMA Y SU ESCLAVO"

 El escenario es un gabinete BDSM, con todo el material y atrezo necesario para el desarrollo de una adecuada praxis de dominación. Los personajes, son un ama y su esclavo. El esclavo está desnudo y de rodillas. El ama, que viste un vestido largo negro y botas de tacón alto, camina hacia él. La bota le roza lo genitales, juega con su excitación. Sé inclina hacia el arrodillado, y su mano le manosea el pene, después se coloca detrás de él, y las manos del ama inspeccionan el culo del esclavo. Estudia detenidamente el  estremecimiento de ese cuerpo al contacto de sus manos. Sé pone frente a él, le obliga a abrir la boca y sacar su lengua. Parece estar inspeccionando a un nuevo sumiso recién adquirido en algún mercado de esclavos. Pero en realidad, no es una nueva adquisición, sencillamente, esta Ama sabe como convertir cada sesión en una novedosa y excitante experiencia, y renovar el deseo del sumiso por entregarse a ella, de una nueva forma única y excepcional. Sus manos, continúan examinando la mercancía, pues así quiere que se sienta su arrodillado, como una nueva mercancía recién llegada, marcada con el sello de una exclusiva propiedad. Le obliga a tumbarse boca arriba, y le pisa para hacerle sentir el poder de sus tacones sobre su cuerpo. Tras ello, ordena al esclavo cuadrar su sumisión poniéndose a cuatro patas. Pisa su espalda. La fusta en la mano, acaricia el cuerpo del esclavo, al que se le eriza la piel cuando siente tan delicadamente el contacto del cuero. Comienza a hablarle..

-" En el día de hoy ¿Consideras que has sido un buen esclavo o un mal esclavo?
-"No lo se.. Mi señora.. Creo que.. Bueno"
-"¿Crees que es importante? ¿Crees que para azotarte necesito una justificación? ¿Crees que necesito justificar mi poder sobre ti y ante ti? ¡¡Contesta esclavo!!"

Le presiona mas con su zapato.

"-No, mi señora, tu poder no necesita justificarse"
-"Si ahora te azotase.. ¿Considerarías que utilizo mi poder de manera arbitraria o injusta?"
-"No, no mi señora"

Zas!! Un fustazo

-"Me gusta que un esclavo asuma su condición y me obedezca, pero no quiero un perro a mis pies que sea un pelota adulador, y solo me siga la corriente. Quiero un esclavo digno, no un perro lacayo. Estoy intentando enseñarte algo importante, así que no me sigas la corriente como a los tontos "

Zas!!

-"Agg..Perdóname mi señora"
"No se trata de justificar, ni de alardear de mi poder, el poder de un ama se impone de una manera natural, mediante la AUCTORITAS que reconocen mis esclavos, la cuestión es que, el castigo es lo que posibilita que un esclavo sirva y satisfaga mejor a su ama, por lo tanto, el castigo es necesario, pero debe tener un sentido, un sentido justo ¿Entiendes?" Zas!!
-"Ahh...Si.. Mi señora"
-"Claro que, hay esclavos muy retorcidos que inconscientemente buscan ser castigados, y hay otros, que solo merecen que se ejerza sobre ellos un poder arbitrario y despótico.. ¿Tu que crees que te mereces?"
-"Mi señora yo solo acato tu voluntad"
-"Tienes razón, me gusta que me des las respuestas correctas.... Por cierto... ¿Has limpiado el cuarto de baño como te ordené?"
-"Si, mi señora"
-"Vamos a comprobar como lo has limpiado, y si has sido un buen esclavo"

Retira la presión de la bota sobre la espalda. El ama se encamina al cuarto de baño. El siervo la sigue a cuatro patas. Ella, entra dentro y empieza a inspeccionarlo, mientras el sumiso aguarda de rodillas en el umbral de la puerta.
Los ojos del Ama escudriñan cada rincón, analizan el nivel de brillo y de limpieza, comprueban como esta colocado cada utensilio para el aseo, cada frasco, cada crema, no se le escapa detalle. Por fin, se vuelve hacia el esclavo, y en actitud severa le ordena acercarse. Él, aguarda el veredicto de rodillas, casi temblando. El ama rompe su estudiado silencio, con un tono de voz meloso y enfático, como el que emplean las mujeres para empatizar con sus mascotas...

"¡ Muyyyy bieeeen! ¡Esto está realmente muy bien! ¡Mejor que nunca!...Compruebo con mucho agrado que te has esmerado... "

Le acaricia la cabeza con sus manos, se la sacude jugueteando con ella.

"Buen chico...Cuando los perritos han sido buenos se les regala un dulce ¿Verdad?..."

Se levanta su vestido negro delante de él, dejándole entrever que no lleva bragas, o es posible que si. Se acaricia levemente su sexo y luego introduce el dedo índice de su mano en la boca del esclavo.

-"¿Te gusta?
- "Si"
-"¿Quieres mas?"
-"Si "
-"¿Como se pide?"
-"Por favor mi Ama"
-" Muy bien, me gustan los perritos educados y glotones"

El ama vuelve a hacer lo mismo con su mano. Y el vuelve a chupar sus dedos.

"¿Quieres mas?"
-"Si, si por favor"
Zas Zas!! Dos bofetadas.
-"No abuses de tu suerte.. ¡Ponte a cuatro patas inmediatamente!

Otra vez el tacón de su bota pisa la espalda del esclavo, y vuelve a coger la fusta.

" Bien... Ahora habrás entendido mucho mejor todas las veces que he tenido que castigarte, pq tus labores de limpieza no alcanzaban el nivel que yo requiero. Sin ese castigo, no hubiéramos llegado a este momento, en el que por fin te has entregado como tu ama espera de ti. Me has dado cumplida satisfacción, y tu ama se siente orgullosa de ti. ¿No te hace eso feliz? ¡Contesta!"
Zas!!
-"Si... Mi.. Señora"
-"Ahora.. Voy a azotarte otra vez.. Primero, pq me apetece y me excita hacerlo...Segundo, pq ahora que entiendes mejor el sentido del castigo lo recibirás con mayor agrado..¿ Verdad?" Zas!!
-"Si... Mi señora"
-"Se supone que darme satisfacción, debe ser tu mayor satisfacción....Quiero oírte dar las gracias por cada azote que te de."  Zas!!
-"Agg.. Gracias... Mi señora"
-"¿Cuantos azotes crees que te mereces? La cantidad justa que precisa un esclavo también es importante.. ¡Contesta!"  Zas!!
"Agg.. No lo sé..Mi ama"
"No lo sabes y tampoco me has dado las gracias" Zas!!
-"Gracias.. Gracias..Mi señora"
Zas Zas!!
-" Agg.. Gracias.. Gracias, mi señora"

Zas!!

-"Por favor... Te lo suplico mi ama"
-¿Ya suplicas?..¡Que nenaza eres!... Pero si, creo que ya es suficiente para ti... Te perdono"
-"Gracias, gracias mi Ama"
"¡Lamiendo mis botas!"

Lame, agradeciendo su perdón, su enseñanza, su castigo.
El Ama sale del cuarto del bañó dejando al esclavo con el sabor del cuero en los labios, y una profunda sensación de abandono. De repente, tras unos minutos interminables, vuelve a oir su voz desde el otro lado de la casa...

"Esclavo, ven aqui ahora mismo y chúpame los pies, hoy te lo has merecido mas que nunca ¡Vamos!"

Fin