AMOR FETICHISTA



AMOR FETICHISTA 
(Por Esclavo imaginario)

Ella llega de trabajar tras una dura jornada mientras su marido mantenido y sin trabajo, aguarda todo el día su llegada. A ella le gusta que su marido la reciba totalmente desnudo. Está recostada en un sillón. Le ordena quitarle los zapatos..

"¡Huele!.... quiero que huelas el sudor de mi esfuerzo gracias al cual vives bajo este techo, te alimento, te visto, y no tienes que trabajar... ¡Huele!"

El sumiso marido huele sus pies enfundados en nailon. Le indica quitarle las medias.

"Que afortunado eres, tu única ocupación es ocuparte de la casa y sobre todo estar pendiente de mi 24/7, mientras que yo, tengo que soportar las tensiones laborales a diario... Dime una cosa:
¿Eres feliz a mi lado cariño?"

"Si mi amor soy muy feliz"

"¿Te arrepientes de haber dejado tu trabajo para poder dedicarte enteramente a mi?

"No mi amor"
"Y ...¿Quien te procura tanta felicidad?"

"Tu, mi amor"

"¿Y quien más? "
Diciendo esto su pie lo coloca debajo de los huevos del marido y empieza a frotarlos con el empeine.

"Ahhh Solo.. tu... Mi amor"

"¡Repítelo otra vez!"

"Solo tu ... Mi amor"

"Solo tu.. Mi UNICO, EXCLUSIVO Y VERDADERO Amor sonaría mejor ¿no crees?"

"Solo.. tu... Mi único, exclusivo... ahhh y verdadero amor"
"Mmm..¡ Ay que ver lo que me cuesta sacarte las palabras cariño, tienes que aprender a expresar mas tus sentimientos.!.. Ahora se bueno y dame un masajito en los pies... Los tengo destrozados"

El marido entrega sus manos a la tersura de los pies de su idolatrada cónyuge. Tras el masaje le interroga...

"¿Has hecho tus labores cariño?"
"Si mi amor"
"¿Y las has hecho bien?
"Si mi amor"

La mujer se incorpora y empieza a acariciarle la cabeza, mirándole con una patológica mirada mezcla de ternura posesiva, y paternalismo dominante.

"¿Te gusta ser mi empleada domética mi amor? "

"Ssi.. Sí.. Me gusta"

"¿Por qué me mientes? Sé que no te gusta nada, pero no podemos permitirnos tener una asistenta y yo trabajo todo el día... Cariño. .. ¡Estoy muy cansada! No quiero ir al cuarto de baño, o a la cocina y encontrarme con una sorpresa desagradable, como un pelo en la taza del water, un vaso sucio... Tienes que esforzarte mi amor, por los dos"

"Si mi amor, tienes toda la razón"

"YO, SIEMPRE....TENGO... RAZON... Bien ¿y que mas has hecho? Son muchas horas sólo. ."

"Nada más, sólo mis labores domesticas"

"¿No habrás estado haciendo cosas que no debes?... Sabes perfectamente que ayer te impuse una penitencia de una semana a palo seco, por encontrarme un pelo en la bañera.. ¿No la habrás incumplido?¿Te has tocado en mi ausencia?"


"Nnno.. No No  para nada"

"Sabias muy bien como era cuando me pediste matrimonio, yo no soy una mujer convencional... Soy extremadamente autoritaria. Y exijo una total entrega de mi maridito hacia mi. Si te impongo una penitencia, y la quebrantas, no me estas demostrando ni Amor, ni respeto, ni entrega.... Estar casado conmigo es como profesar una religión.. ¿No lo has entendido todavía después de un año de casados? "

"Mi amor... Lo entiendo, pero no he hecho nada"

De buenas a primeras le agarra la polla, presionándola con su mano, y echándole una severa mirada de reprobación.

"No me mientas, la base de una pareja es la confianza, y esta no puede existir sin la sinceridad, ¿verdad cariño?"

"Ahhh.. Por favor.. te juro que no me... he tocado"

" Es posible... Pero a que..  ¿lo has pensado eh? ¡contesta!"

"Ahhh... Lo siento mi amor"

"Pensarlo tampoco vale, haces trampa cariño y no me gusta. Esos pensamientos egoístas de auto satisfacción, son los que te distraen, e impiden que realices tus labores como una chacha competente. Y cada vez que regreso a casa tras una agotadora jornada laboral, me encuentro con que tengo que ir arreglando tus desastres, y empiezo a perder la paciencia, ¿me entiendes cariño?... Al menos, necesito que me entiendas"

"Te entiendo... ahhh te entiendo.. lo siento mucho"

Una mano le tiene agarrado y la otra le suelta dos bofetadas zas zas!! Le abofetea la cola. Zas Zas!!

"¡No me sigas la corriente como a los tontos! "

Se levanta con gesto muy airado, y camina descalza hasta el baño. El marido escucha caer el pis de su cónyuge. La pequeña cascada dorada cesa, y el aire se llena de la voz reprochadora de su mujer:

"¡Ven aquí ahora mismo!"

Se acerca hasta el cuarto de baño, ella sentada en la taza del water y le señala el lugar vacio donde debería haber un rollo de papel higiénico.

"¿No has repuesto el papel higiénico?"

"Lo siento... se ha terminado"

"¿Y no has ido a comprar mas?"

"Se me ha ido el santo al cielo... Yo... lo iba a comprar... pero... al final se me ha olvidado. .y ya ibas a llegar tu y..."

"Definitivamente... ¡Eres una chacha desastrosa!

Se levanta, con una expresión de hastío y enfado pone su pie sobre la tapadera de la taza, doblando una pierna, le ordena a su marido acercarse y ponerse de rodillas.

"¡Límpiame con la lengua!

El marido se arrodilla y lame sutilmente la vagina humedecida por el elixir de su adorada cónyuge. Tras ello, ella le suelta una bofetada y encamina sus pasos hacia el salón. Vuelve a requerir la presencia de su esposo.

"¿Has barrido y fregado el suelo de la casa?"

"Si mi amor"

"¿Cuantas veces has pasado la escoba y la fregona?"

"Doo.. Dos como me dijiste"

"¡Te dije tres!... ¿Sabes que te dice que una chacha es aplicada?"

"Nn...No"

"Que huele a lejía... Tu hueles a perfume caro de señorito mantenido por su señora esposa.."

La mujer empieza a caminar descalza por el salón. Después se sienta y se pone a examinar las plantas de sus pies. Extiende su pierna y le indica a su marido que se arrodille y observe la planta de su pie.

"¿Hay pelusa en mi planta?"

"Un... Poco"

"¡Un poco!... Dime una cosa. .. ¿Para un fetichista como tu puede haber algo mas sagrado que los pies de su amada esposa?
"
"No.... No lo hay"

"Pero has permitido que me ensucie los pies UN POCO. ¿Eso es lo que veneras mis pies...¿UN POCO? ¿Es ese el nivel de tu devoción por mi?"

"Perdona... perdóname"

"¡Cállate y límpiamelos con esa lengua de perro ocioso que tienes !"
La lengua del marido trabaja afanosamente. La mujer le golpea la boca con sus plantas. Quiere oirle suplicar perdón ante las plantas de sus pies, le ordenar lamer nuevamente hasta que otra vez le golpea, para que vuelva a suplicar que le perdone. Después, le introduce un pie en la boca,luego el otro y chupa compulsivamente, por medio de su lengua salibada intenta desesperadamente lavar sus pecados ante el alma psicótica de su esposa. Le obiga a tumbarse como una alfombra y castiga su cuerpo con las plantas mancilladas de sus pies.Tras sentir la furia de sus pies le ordena incorporarse.

"¡No puedo mas, ya no puedo más! - empieza a decir en un tono de afectada desesperación y hartazgo - es que creo que ni siquiera me escuchas, no se como decirte las cosas. He llegado a mi limite y creo que tenemos que dejarlo"

"No por favor- suplica el marido - te juro que me esforzare mucho más a partir de ahora, por favor"

"Lo siento, también es doloroso para mi, pero mi decisión esta tomada, y creo que es lo mejor para los dos"

"Te suplico cariño, dame otra oportunidad, será como tu quieras..."

El marido continua suplicando. Ella escucha con actitud disciplinante y altiva mirándole de perfil.
Gira su cabeza hacia él. Observa a su marido, arrodillado, desnudo,y suplicando. Extiende su pierna distraídamente y con ligereza. La punta de su pie juguetea con el pene del marido.

"Sigue suplicando.. Te pones muy guapo cuando suplicas¡ ¡Suplica!"

El marido prosigue con su pliego de ruegos entrecortadamente, y una erección, que solo ella es capaz de producirle empieza a tomar vida. A la mujer le invade una sensación de poder excepcional, otorgada por la belleza de sus pies, y su actitud de diosa, dominante del erotismo mas perverso. Una corriente recorre todo su cuerpo, en una vibración única, que le provoca un inefable estado de excitacion. Su marido suplica, cada vez mas desesperado.

"Por favor,... Seré una buena.. chacha y..."

"¿Que has dicho? -Pregunta con un distraído interés- Repítelo" Y al tiempo su empeine presiona los huevos del marido.

" Ahhh  Seré... una buena chacha"

Retira su pie, y adopta una actitud de maestra que imparte lecciones de supremacía moral.

"No tienes que serlo, tiene que gustarte serlo, y entonces, seras la mejor de las chachas que se pueda tener... Cuando limpias el suelo tienes que pensar que es el suelo que mis cansados y abatidos pies pisan, cuando limpias la taza del water tienes que pensar que es donde mi hermoso culo denscansa, para que mi sagrada vejiga haga lo suyo.... Limpiar la casa es  tan importante como adorar mis pies, mi escultural culo o mi adorada vagina, si no limpias bien... ¿Que clase de adoración me profesas? ¿Que clase de sentimientos tienes hacia tu amada esposa? ¿Eh?"

"Tienes toda la razón, lo dejare como los chorros del oro"

"Eso es, quiero que este suelo resplandezca a mi paso, y que mis plantas permanezcan relucientes,¿Entiendes?"

"Si cariño"

La mujer emite un impostado suspiro de claudicación.

"¿Que voy a hacer contigo?... Te voy a perdonar, y te voy a conceder otra oportunidad, pero estas a prueba. No voy a pasarte ni una mas"

"Gracias.. Gracias mi Amor, te juro que no te vas a arrepentir"

"Menos palabrería y más acción"

Diciendo esto, le tiende la mano, indicándole que la mire.

"Después de trabajar me he ido a hacer las uñas y me las he pintado de tu color favorito. Siempre pensando en como satisfacerte, en cambio yo llego a casa después de trabajar y me encuentro con tu falta de atención hacia mi ...."

"No se que decir perdóname... No te merezco.. "

"Exacto... No me mereces... Al menos lo reconoces... "- exhala un suspiro- ¡Ven aquí ponte mas cerca!"

El marido se acerca hacia donde esta ella sentada y aguarda de rodillas. Le coge la cabeza entre sus manos, le observa con doliente ternura.

"No se como lo haces, pero siempre consigues ablandarme. Te aprovechas de una pobre mujer trabajadora que se encuentra sola en la vida... Anda, ¡Abrázame!"

La mujer acoge a su marido en su regazo, siente la suave presión de sus pechos sobre su cara. Arde en deseos de besarlos, pero está bien enseñado, y sabe que el acceso al paraíso esta supeditado a los caprichosos deseos de su idolatrada esposa.

"¿Mis bofetadas te han hecho daño cariño?
"No no... muy poco"

"Si me pongo dura y te hago daño es por tu bien".
¿No me guardas rencor verdad?"

"No cariño, que cosas tienes"

"Besa mi mano.."

El marido besa y chupa la mano castigadora de su esposa.

"Mmmm ASI ME GUSTA...Muy bien, no puede haber rencor entre nosotros, ¿verdad mi amor?.... Bueno, me has hecho pasar un día muy malo, no me ha gustado nada lo que me he encontrado en casa al llegar de trabajar, ¿Estas arrepentido?"

"Si mi amor"

"¿Muy arrepentido?"

"Claro mi amor"

"¿Muy arrepentido?"

"Claro mi amor"

"Pues... Quiero... Que me expreses tu arrepentimiento a un nivel muy profundo, quiero que me alivies las tensiones laborales, y quiero, que me hagas olvidar los disgustos que me das...."

La mujer pone la mano sobre la cabeza de su marido.

"Si eres una chacha aplicada y un marido obediente, obediente como un perro sumiso, podemos ser muy felices ¿entiendes cariño?"

"Si mi amor"

"Estamos hechos el uno para el otro, sobre todo tú estas hecho para mi...¿No crees cariño?"

"Si mi amor"

"Mmm eso es, ahora vas a terminar de limpiar lo que has empezado antes en el baño "

La mano de la mujer sobre la cabeza del marido presiona hacia abajo para obligarle a someterse al placer de su sagrado coño. Lo apresa entre sus piernas y la oye decir:

"Chupa mi perrito".

El marido es consciente de que ha sido presa de sus propias debilidades, ha caído en las redes de una perversa dominante más allá de lo razonable,; y ya no tiene ningún control sobre su voluntad. Se ha casado con una autentica sádica pero es una malvada adorable en su vida.

Fin.

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