"Escenas costumbristas BDSM III: "El juego" "EL JUEGO"

 Una mujer está sentada en un sillón. Es una tarde aburrida de verano. Tiene el mando de la televisión en su mano. Va cambiando de un canal a otro. Su cara, dibuja un gesto de aburrimiento. Aprieta un botón tras otro con una expresión de creciente hastío. Esta mujer, posee otro mando. Tiene el mando sobre la vida de un hombre, y no hay nada mejor que ejercer ese mando, pulsar los resortes precisos que accionan la inevitable sumisión de este hombre hacia ella, para salir del aburrimiento. Apaga el televisor, y arroja el mando a un lado del sillón con un gesto despreciativo.

Decide llamar a su sumiso. Este, acude desnudo y se arrodilla ante ella. Los dedos de su mano acarician los labios del arrodillado, se los introduce en la boca para que los chupe. Le agarra el pene y empieza a ponerle a tono, observándole con sádica satisfacción, es como una niña caprichosa que se aburre, y para salir de su aburrimiento enreda y manipula, y el cuerpo de este hombre es el objeto, el juguete al que poder manipular a su antojo. Ahora abofetea el pene empalmado mirándole con severa altivez. Se recuesta hacia atrás suspirando, y como distraídamente coloca el empeine de su pie bajo los genitales del sumiso. Como ya he dicho, ella tiene el mando sobre este hombre, y sabe que botones debe pulsar para hacer de su excitación un rendido culto a su persona, sugestionarle a través de la piel, de que está a los pies de la diosa de su placer.

Coloca un pie entre el pecho y el hombro del sumiso, se lo da a lamer pero sin lamer. Presiona con el pie su pecho y le empuja para casi hacerle caer hacia atrás. Se yergue altiva sentada al borde del sillón, y señala con su dedo índice el suelo, ordenándole tumbarse boca abajo.

"Arrástrate hasta mis pies y bésamelos ¡Vamos!"

El sumiso repta y llega a las inmediaciones de sus pies, los besa, pero apenas lo hace ella los levanta y los pone sobre la cabeza y la espalda del esclavo. Sentir ese cuerpo humillado bajo la caricia de sus pies, la excita de una manera especial, divina y única.
Le ordena incorporarse, se recuesta hacia atrás, y extiende una de sus piernas hacia él..

"Refréscame los pies, hace tanto calor!"

El sumiso cumple con su obligación, que además es su devoción, y masajea los pies del ama con la lengua y los labios. Es ellla, con su poder de Dómina, la que enciende y alienta la libido del fetichista, haciendo que el deseo por adorar sus pies no mengue jamás, sino que crezca cada vez un poco más, como una llama que no cesa, que no puede extinguirse, pues es capaz de resistir la fuerza de cualquier ráfaga tormentosa, o viento huracanado; por muy virulentas que sean todas las masas de aire que en el mundo son, por obra y gracia de la Madre naturaleza. Tal es el poder otorgado a sus divinos pies
Dobla su pierna y coloca un pie sobre una de las rodillas, le empuja la cabeza para que el esclavo se lo meta en la boca..

-"Refréscame mas profundamente... Mmm Así, buen chico"

Le ordena parar tras unos minutos de extrema adoración.

-"Bien, quiero proponerte un juego..¿ Te gusta que juegue contigo? ¿eh?"

El esclavo, contesta afirmativamente con la boca muy pequeña, es consciente de que en cualquier perverso juego ideado por ella, tiene todas las de perder, pero al mismo tiempo, no puede evitar sentirse excitado y desear jugar, o mejor dicho, que juegue con él.

"Es un juego muy sencillo, yo te pregunto algo que tu tienes que adivinar, si lo haces te doy un premio, pero si no... Te castigo.... ¿Lo entiendes?"
-"Ssi..Si.. Mi Ama"
-"Bien, te pregunto: ¿Crees que hoy me he puesto bragas o no llevo nada debajo? Si aciertas, me comes el coño, pero si fallas, te pegare con mis manos y con mis pies, y no quiero que supliques, si suplicas, te pegare mas y mas fuerte...¡Contesta ya¡ ¿Llevo o no llevo bragas?"
-"Yo.. ehhh.. No sé .."
-"¡Contesta inmediatamente!
-"Las llevas.. Las llevas"
-"Bien, vamos a comprobarlo"

Ella, se pone en pie y se levanta la falda de su vestido, exhibiendo su vagina desnuda en toda su gloria y esplendor de Diosa venerada.

-" Has fallado, que pena, mira que me apetecía que me lo comieras... Pero... ¿Mmm?...
Tu respuesta me resulta muy inquietante, no solo pq es incorrecta, es fea, y me dice cosas de ti que no me gustan y me hacen enfadar mucho.... Creo que eres uno de esos perros retrógrados, que piensa que la mujer debe proteger su virtud, y debe ir bien tapadita ¿Eh? Pq si no lo hace, en el fondo piensas que es una puta ¿Crees que soy una puta por no llevar bragas?"
-"¿Yo? Nno No..
-"Ya lo creo que si lo piensas" Zas zas.

Le abofetea, le pone a cuatro patas se sienta sobre él, y le propina una azotaina con sus manos. Aprieta sus muslos contra su cintura, para recrearse en su poder de amazona. Mas azotes, el jamelgo humano suplica. Ella se levanta, pone su pie sobre la espalda.

-"Ya suplicas, ¿Qué te había dicho? Todos los machitos de mente sucia en cuanto descubren el verdadero poder de una mujer suplican y entonces, hay que obligarles a que se arrastren para que aprendan"

Presiona con su pie la espalda para obligarle a tumbarse en el suelo. Le ordena volver a incorporarse a cuatro patas, para nuevamente pisarle la espalda y obligarle a estar en el suelo. Le somete a lo mismo varias veces. Después, le castiga el cuerpo con sus pies, le pisa, le abofetea todo su cuerpo, boca arriba, boca abajo, sufre la furia desatada de sus pies. Tras el castigo, ella se dirige al cuarto de baño, desde alli le ordena acudir. La encuentra dentro de la bañera, tiene un pie apoyado en el borde. Le indica que entre y se arrodille ante su divino sexo.

-"Has ofendido mi sensibilidad de mujer en lo mas hondo de mi misma, me has dejado muy triste, no me lo esperaba de ti, y cuando una Diosa esta triste su sexo llora.."

Pone su mano sobre la cabeza del esclavo para que se incline un poco mas y una lluvia dorada y cálidamente celestial cae sobre la cara del sumiso, mientras ella le dice en un tono sugestivamente sensual..

-" Ahhh.. Ahora, ya sabes como llora el sexo de una Diosa"

Después, coge el teléfono de la ducha y le apunta con agua fría, el esclavo gime del frio mientras ella se ríe maliciosamente. Le indica que se enjabone rápido y luego le aclara. Cierra el grifo y se dirige al esclavo..

-" Es importante que aprendas a empatizar con la sensibilidad de una Diosa, que sientas su dolor cuando se la ofende, te ayudará a medir mejor tus respuestas, y a venerarla como es debido ¿No crees?"
-"Si... Mi..Señora" -contesta el esclavo aterido de frio-
-" Ahora, pídeme perdón y besa mi coño"

Así lo hace. Vuelve a exigirle que pida perdón y se lo bese varias veces. Después, le indica que salga de la ducha. Mientras ella se ducha, el esclavo se termina de asear y secar. Aguarda devotamente la salida del ama para secarla y asistirla. Tras ello, le ordena retirase y que aguarde en el salón hasta que ella acuda.
Transcurre un cuarto de hora mas o menos, y el ama aparece en el salón, se ha cambiado de vestido, está con el pelo mojado, su belleza resalta natural, fresca y salvaje. Se coloca frente a su esclavo arrodillado....

-" El juego todavía no ha acabado, dime ¿Crees que ahora me he puesto bragas o no? ¡Contesta!
-" Ehhh ¿No?"

Se levanta el vestido, para que pueda apreciar que esta vez lleva unas bragas negras con adornos rojos de lo mas estimulantes para el Eros fetichista. Ella suspira con fingida desesperación mientras le dice..

-"No das una... Y mira que me apetece que me comas el coño... Sólo quería divertirme un poco, pero este juego me esta descubriendo que tienes una mente muy sucia y retorcida... ¿Por quien me tomas? Me considero una mujer decente y virtuosa que protege su honra, y muy selectiva. ¿Crees que yo soy de esas que van por la vida sin las bragas puestas? ¿Me tomas por una puta?"
-"Ýó?? No.."
-"¡Perro!
Zas Zas!!

Es una tarde aburrida de verano, y ella se divierte con su esclavo.

Fin.